A cerca de seis millones de pesos asciende la inversión realizada a las dependencias de la Base Samu 90 de Cañete, que fue reacondicionada debido al deterioro que presentaba en sus pisos y parte de la techumbre. 

La intervención permitió mejorar las condiciones para el equipo que trabaja en sistema de turnos durante las 24 horas, todos los días del año, junto con integrar una oficina para actividades administrativas. 

“La habilitación de la residencia Samu es de vital importancia porque les da un espacio de descanso adecuado al equipo funcionario, quienes laboran en un sistema de turnos que cubre las 24 horas del día, los siete días de la semana”, comentó la subdirectora administrativa (s) del hospital de Cañete, Mabel Sánchez.

El servicio que presta la Base SAMU 90 es controlado por el Centro Regulador ubicado en Concepción, que organiza las atenciones en toda la red provincial.

Las dependencias ya están siendo utilizadas, según lo informó la enfermera coordinadora, María Victoria Gómez, quien destacó la gestión y motivó a la comunidad a realizar un uso adecuado de la línea 131.

“Es importante que llamar al número 131, cuando se solicite información como el nombre, la edad, el sexo, si hay alguna enfermedad o qué ocurrió, la persona que llama sean meticulosa en responder pues son datos muy importantes para evaluar el tipo de móvil que se requiere y también para que el equipo ya pueda ir adelantando la atención que necesita el usuario, saber qué equipamiento va a necesitar, qué insumos tiene que bajar y también hacer buen uso de este servicio, que es solo para emergencias”, puntualizó la enfermera.

El equipo Samu Base 90 que funciona en el hospital de Cañete, está compuesto por ocho profesionales, entre ellos de la enfermería y también de la obstetricia, que se desempeñan como reanimadores, cuatro operadores telefónicos, ocho conductores asistenciales, ocho técnicos en enfermería y una enfermera supervisora.